La economía creativa o economía naranja es una herramienta de desarrollo cultural, social y económico. Se diferencia de otras economías por el hecho de fundamentarse en la creación, producción y distribución de bienes y servicios, cuyo contenido de carácter cultural y creativo se puede proteger por los derechos de propiedad intelectual.
La economía naranja se puede convertir en una estrategia eficiente para la reactivación económica post pandemia debido a sus bajos costes de inicio de emprendimiento, si tienes una buena idea ese es el comienzo.
Para ello, uno de los elementos más importantes es fomentar la innovación. Algunas de las recomendaciones que nos brinda el BID en su texto La pandemia pone a prueba a la economía creativa - ideas y recomendaciones de una red de expertos son:
Promover la innovación y los nuevos modelos de negocio por medio de fondos de inversión regionales y de innovación digital con un mayor protagonismo del sector privado y a través de políticas customizadas de fomento, asociadas con una mayor innovación, sofisticación de producto y apertura de nuevos mercados.
Estimular el trabajo conjunto para rediseñar e innovar en el uso de espacios públicos como, por ejemplo, los espacios de coworking, FabLabs y los museos que diversifican sus modelos de negocio y los adaptan a los nuevos protocolos sanitarios.
Impulsar la creación de espacios y centros tecnológicos orientados a la innovación digital del sector (vigilancia tecnológica, adaptación tecnológica, adaptación basal aplicada, prototipado, y spin-off de empresas tecnológicas).
Acelerar el desarrollo de nueva regulación para solidificar y respaldar nuevos modelos de negocio y mercados digitales, así como para atraer nuevas inversiones. Acelerar el desarrollo de legislación relacionada con la propiedad intelectual, los derechos de autor y la denominación de origen.
Regulación y legislación que permita incrementar el volumen de contenidos locales disponibles en las grandes plataformas y apoyar el desarrollo de plataformas innovadoras con contenido local.
¿Y tu como creativo si eres actor, artista, arquitecto, cantante, cineasta, chef, compositor, editor, escritor, escultor, director, diseñador, desarrollador de software o videojuegos, fotógrafo, pintor, productor, publicista, etc, como ves el futuro de la economía naranja
Del mismo modo es importante fomentar la colaboración entre los creadores y los sectores público y privado. Algunas ideas que debemos tener al respecto son:
Potenciar políticas públicas transversales y generar un nuevo diálogo entre el sector público, la sociedad civil y el sector privado.
Establecer incentivos fiscales para la colaboración público-privada en materia de inversión en desarrollo de nuevas plataformas, contenidos y programas digitales.
Desarrollar una estrategia enfocada en atraer al sector privado para que éste juegue un papel más importante en la producción y distribución e inversión de los productos y servicios creativos.
Fomentar el compromiso de patrocinadores, sistemas de mecenazgo como crowdfunding y crowdsourcing (ej.: Patreon, Kickstarter) a través de, por ejemplo, iniciativas de matchfunding.
Fomentar el acceso a la cultura con mecanismos gubernamentales de compra de productos y servicios de los creativos de manera que se reivindique el valor de su trabajo.
Establecer políticas para facilitar el comercio internacional de servicios y el de bienes culturales. Apoyar al desarrollo del e-commerce (smart contracts, micropayments, blockchain, data mining, IP tracking, etcétera).
Implementar mesas de trabajo y alianzas interministeriales para desarrollo de innovación en el sector y en soluciones de gobierno (acciones coordinadas, investigación, desarrollo, fondos, etcétera) e incentivar la experimentación a través de una plataforma de concurso: cruce de disciplinas, habilidades, artistas, formatos, y lenguajes.
Si te intereso este post y quieres profundizar en el tema te invito a leer el documento completo La pandemia pone a prueba a la economía creativa: Ideas y recomendaciones de una red de expertos